Las opciones de tratamiento dependen del estadio de estas neoplasias.
Una vez realizado el diagnóstico histológico de esta patología, se realizan las pruebas complementarias necesarias:
Analítica con marcador tumoral.
Tomografía computarizada.
PET con marcadores como FDG.
Resonancia magnética hepática para determinar o descartar la extensión y/o diseminación de la enfermedad en el resto del cuerpo y definir el mejor abordaje terapéutico para el paciente.
Estadios localizados:
Cirugía primaria, coordinado con equipo quirúrgico especializado.
Tratamiento adyuvante: capecitabina.
Estadios avanzados:
Tratamiento sistémico asistencial: quimioterapia (cisplatino/gemcitabina, FOLFOX, irinotecan). En la actualidad se planteará tratamiento con inmunoterapia en los casos con perfil molecular favorable para dicho tratamiento.
Ensayos clínicos en base a alteraciones moleculares.